¿Qué es la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz?
En este apartado se habla sobre la misión, la historia, el espíritu del Opus Dei y los rasgos que caracterizan a la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz.
La Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz es una asociación de clérigos intrínsecamente unida a la Prelatura del Opus Dei. Tiene como fin fomentar la santidad de los sacerdotes seculares en el ejercicio de su ministerio al servicio de la Iglesia.
En este apartado se habla sobre la misión, la historia, el espíritu del Opus Dei y los rasgos que caracterizan a la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz.
La Sociedad Sacerdotal es una asociación de clérigos que pretende ofrecer los medios espirituales que sostengan y apoyen la vida interior, la formación doctrinal y pastoral, y la unión fraterna entre los sacerdotes.
"Un buen día le dije a mi padre que quería ser sacerdote: fue la única vez que le vi llorar": Así iniciaba san Josemaría el relato de su vocación sacerdotal. Ahora, es modelo de vida para muchos sacerdotes en el mundo.
La Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz hunde sus raíces en el amor de san Josemaría por los sacerdotes diocesanos y en el acontecimiento fundacional que tuvo lugar el 2 de octubre de 1928, cuando el Señor le hizo ver el Opus Dei. No obstante, su origen institucional se sitúa unos años después, en 1943.
Pueden pedir la admisión como agregados o supernumerarios de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz los sacerdotes (y los diáconos que declaren expresamente su intención de llegar al presbiterado) incardinados en distintas diócesis.
El Opus Dei está presente en la Iglesia para fomentar la búsqueda de la santidad en medio del mundo. Se exponen a continuación cuatro rasgos de su espíritu, estrechamente unidos entre sí: la filiación divina, la unidad de vida, la santificación del trabajo y la piedad doctrinal.
Mensaje de Mons. Fernando Ocáriz con ocasión de la solemnidad del Nacimiento de Jesús.
Queridísimos: ¡que Jesús me guarde a mis hijas y a mis hijos!
Este año la celebración de la Navidad adquiere un tono peculiar, consecuencia de la emergencia sanitaria mundial que estamos viviendo. Quizá llevemos hasta Belén, para poner ante la Sagrada Familia, también alguna preocupación o sufrimiento particular.
Contemplar al Niño Jesús en el pesebre o en brazos de su Madre, en un entorno lleno de limitaciones, también materiales, nos ...