Cristina Abad descubre en 'La libertad de amar' el "genio femenino" de la futura beata Guadalupe Ortiz de Landázuri

La periodista Cristina Abad presenta en el libro 'La libertad de amar' (Ediciones Palabra) a la próxima beata Guadalupe Ortiz de Landázuri, química madrileña que será beatificada el próximo 18 de mayo de 2019, una mujer "extraordinaria pero normal", tal y como la describe la autora, que tras terminar su licenciatura en 1940, decidió dedicar su vida a su vocación cristiana en la Iglesia. Será la primera mujer beata del Opus Dei.

La Vanguardia (Europa Press) Cristina Abad descubre en 'La libertad de amar' el "genio femenino" de la futura beata Guadalupe Ortiz de Landázuri

La periodista Cristina Abad presenta en el libro 'La libertad de amar' (Ediciones Palabra) a la próxima beata Guadalupe Ortiz de Landázuri, química madrileña que será beatificada el próximo 18 de mayo de 2019, una mujer "extraordinaria pero normal", tal y como la describe la autora, que tras terminar su licenciatura en 1940, decidió dedicar su vida a su vocación cristiana en la Iglesia. Será la primera mujer beata del Opus Dei.

El libro se presenta este miércoles 7 de noviembre en un acto organizado por Ediciones Palabra y la Librería Neblí, en formato de entrevista con la autora del libro, Cristina Abad, y el vicepostulador de la causa de la próxima beata, José Carlos Martín de la Hoz.

Ortiz de Landázuri nació en Madrid en 1916, en cuya Universidad Central estudió Químicas, "en unos años en que el horizonte femenino no era ni la Universidad ni el trabajo", señala la autora del libro.

La que será la primera mujer del Opus Dei elevada a los altares "es un ejemplo de mujer que vive con radicalidad su vocación cristiana en la Iglesia, a la que ama desde su cátedra docente, que se manifiesta en las iniciativas que promueve en las barriadas de Belmonte y Valdebebas (Madrid), en México e Italia", afirma Abad.

Tras estudiar su correspondencia y diarios, la periodista señala que se encontró a una mujer "aventurera, generosa, fuerte, sencilla de trato y muy alegre". "Extraordinaria pero normal. Química y profesora que descubrió su vocación al Opus Dei a los 27 años, después de conocer al fundador, san Josemaría Escrivá", explica.

Abad ha elegido una fotografía de 1932 como portada de su semblanza, con Guadalupe y una amiga tras un vuelo en avioneta en Tetuán, con 16 años, "como anticipo de su espíritu pionero".

"Su vida refleja bien lo que el Papa Francisco destaca en su Exhortación apostólica Gaudete et exsultate, es decir, una santidad cercana, que manifiesta el genio femenino y un compromiso continuo con la promoción de la mujer, como muestra su participación en labores educativas", añade.

La autora destaca también de Guadalupe Ortiz de Landázuri su amor apasionado al mundo y su gran fortaleza ante la enfermedad que le llevó a la muerte en plena madurez, en 1975.

La ceremonia de beatificación tendrá lugar el próximo 18 de mayo en el pabellón de Vistalegre, en Madrid, y será presidida por el cardenal Angelo Becciu, prefecto de la Congregación de las Causas de los Santos.

Cinco mujeres en una clase de 70 estudiantes

Guadalupe Ortiz de Landázuri nació en 1916 en el madrileño barrio de Malasaña, después de estudiar bachillerato en el Instituto Miguel de Cervantes. En 1933 se matriculó en la carrera de Ciencias Químicas, siendo una de las cinco mujeres de una clase de 70 estudiantes.

Perteneciente al Opus Dei desde 1944, Ortiz de Landázuri desarrolló su vida profesional en España, México e Italia, países en los que llevó a cabo una intensa evangelización y promoción social, especialmente dedicada a la mujer.

La próxima beata era doctora en Químicas con una tesis sobre 'Refractarios aislantes con cenizas de cascarilla de arroz', y en 1965 recibió el Premio Juan de la Cierva de investigación.

A partir de los años 40 del siglo XX, Guadalupe enseñó Física y Química en varios centros de Madrid, como el Colegio de las Irlandesas, el Liceo Francés, la Escuela femenina de Maestría Industrial, el Instituto Santa Engracia y el Instituto Ramiro de Maeztu.

Tras su trabajo en España, México e Italia, es recordada por su "pasión universitaria e investigadora" y por su "compromiso social lleno de disponibilidad y alegría". Falleció en 1975, tras una larga enfermedad del corazón.

La Vanguardia